
Las chanclas son un calzado muy fresquito para el verano porque llevas el pie al aire libre, pero no siempre son cómodas o, al menos, adecuadas para la salud de tus pies. Los podólogos avalan esta afirmación y aseguran que tan malo es un zapato de tacón alto, como uno excesivamente plano. En este sentido, la marca de calzados Surippa lanza al mercado un modelo de chanclas de características innovadoras pensadas para cuidar la salud, ya que amortiguan tu pisada, por lo que no son solo beneficiosas para tus pies, también para la espalda y articulaciones.
Cómo tiene que ser una chancla para que no perjudique a tu salud
Cada vez sacan al mercado más variedad de chanclas, pero de características muy similares y no todas están hechas para todos los pies ya que esta parte del cuerpo sufre mucho en verano.
Una chancla tiene que ser gruesa y con amortiguación; y el calzado de suela fina, no la tiene. Esto hace que cuando apoyes el pie, el puente pierda altura y la fascia se tense, llegando a dañar el sistema aquíleo-calcáneo que es el encargado de realizar el primer movimiento del paso. Esto una y otra vez, provocaría posteriores lesiones de espalda y en el talón, lugar donde se concentra el dolor que ocasiona la fascitis plantar.
Los podólogos aconsejan que la suela mida unos cuatro centímetros, tanto para hombres como para mujeres. Las chanclas Surippa son cómodas, ergonómicas y suaves, fabricadas con la tecnología Dynergy que es un tipo de suela que tiene unas ondas en 3D superpuestas, que permite una doble amortiguación. Son chanclas de recuperación, tanto para después de hacer deporte, como para después de haber utilizado un zapato incómodo durante horas. Para casa o para el exterior.
Recomendaciones para cuidar tus pies en verano
Hay que ser conscientes de que hay que cuidar los pies durante todo el año, pero en verano sufren más porque están más expuestos que en el invierno, protegidos de las inclemencias del tiempo. ¿Cómo debes cuidar de tus pies para que no lo pasen tan mal?
Lo primero es que no dejes de usar los calcetines de golpe ya que los pies quedan más expuestos a rozaduras y ampollas y, por tanto, necesitan adaptarse al cambio poco a poco.
No hagas largas caminatas de un día para otro. La mayoría de las personas se llevan los meses de invierno casi sin moverse, empieza el buen tiempo y son todo salidas; por lo que si llevas mucho tiempo sin andar, tus pies se sobrecargarán.
Y si vas hacerlo, evita las chanclas. Por muy cómodas que sean, no son el calzado adecuado para una larga caminata. Usa las Surippa cuando vuelvas del recorrido para recuperarte. Tus pies te lo agradecerán. Evita que las chanclas tengan una suela excesivamente plana. Siempre es mejor que estén fabricadas con algo de amortiguación y con materiales que se adapten al pie con facilidad. Las suelas excesivamente planas y finas pueden provocarte una sobrecarga de toda la musculatura del pie y de la pierna.
